Una suave voz femenina me susurró al oído una madrugada
Quien puede vivir en el futuro
y vivir en el presente
y no enloquecer
y vivir en el presente
y no enloquecer
Quien puede vivir entre espíritus
y vivir entre humanos
y no perecer
Somos los milagros que Dios hace
probar la fruta amarga del tiempo
Somos preciosos y un día
nuestro sufrimiento se convertirá
en las maravillas de la Tierra
Todas las cosas son ecos de la Voz que habla por Dios.